La Custodia de Arfe, un tesoro en el Corpus

Se trata de una de las mayores joyas de la cristiandad y se puede ver durante todo el año en la Catedral de Toledo. Sus medidas y belleza imponen, con más de dos metros de oro y plata que sale a la calle sólo en la procesión del Corpus, este año el jueves 20 de junio.

En su parte central hay un “ostensorio” o “custodia de mano”, de pequeño tamaño y de estilo gótico, mandada labrar por la Reina Católica a finales del XV a un joyero catalán, Almerique, quien utilizó 17 kilos del primer oro traído de América por Cristóbal Colón, además de pedrería y diversas figuras esmaltadas.

Su peso asciende a más de 200 kilos (exactamente 183 kilos de plata y 18 de oro), conteniendo 260 estatuillas, situadas bajo doseletes o pequeñas bóvedas repujadas. Como curiosidad, su autor, Enrique de Arfe,  redactó un manual para desmontar y ensamblar de nuevo las 5.600 piezas que la componen mediante los correspondientes 12.500 tornillos, lo que ha servido en varias ocasiones para su limpieza y restauración.

La custodia ha salido de su lugar de origen en varias ocasiones y también ha conocido el peligro en la invasión francesa

El Cardenal Borbón lo salvó de la rapacidad de los soldados de Napoleón llevándoselo consigo a Cádiz, donde permaneció hasta el fin de la guerra de la Independencia.